Con ocasión del mundial de fútbol he querido imitar a Javier Marías planteando mi equipo ideal para una selección literaria de Hispanoamérica. He aquí los seleccionados:
Portero: Dos Robertos alternándose en el puesto. Arlt y Bolaño. El primero un tanto estrambótico, el segundo con definido estilo propio aunque algo más ortodoxo. Ambos polifacéticos, excelentes en el juego aéreo y en las salidas, y con solvencia para jugar el balón con los pies.
Defensas centrales: Dos poetas: César Vallejo por su concentración y capacidad de sufrimiento, y Pablo Neruda por ser de largo aliento y tener actitud para sumarse al ataque.
Lateral izquierdo: Alfonso Bioy Casares que es enérgico, creativo y capaz de alimentar a los delanteros con sus incursiones por la banda.
Lateral derecho: Arturo Uslar Pietri por tenaz y terco, todo un especialista en la marcación hombre a hombre.
Volantes: Octavio Paz que trajina por todo el campo, y es recuperador y metódico. Jorge Luis Borges, el 10 del equipo, marca la diferencia. Julio Ramón Ribeyro suele ser muy fino en espacios cortos. Augusto Monterroso por su manejo de los tiempos y su excelente pegada.
Delanteros: Guillermo Cabrera Infante porque su experiencia en las ligas inglesas lo ha convertido en un cabeceador eximio. Juan Rulfo que aparece poco pero siempre marca.
En el banco de suplentes: Juan Carlos Onetti por ser un defensa cuya rudeza intimida a los delanteros. José Lezama Lima, un volante tremendamente creativo aunque un tanto fuera de forma, es ideal para ingresar en los segundos tiempos. Alfonso Reyes que es un volante de contención fuerte y muy ortodoxo. Finalmente, como delantero suplente, Emilio Adolfo Westphalen que es insuperable cuando está en racha.
Director técnico: Julio Cortazar por su capacidad para detectar las estrategias del rival y desarmarlas.
Portero: Dos Robertos alternándose en el puesto. Arlt y Bolaño. El primero un tanto estrambótico, el segundo con definido estilo propio aunque algo más ortodoxo. Ambos polifacéticos, excelentes en el juego aéreo y en las salidas, y con solvencia para jugar el balón con los pies.
Defensas centrales: Dos poetas: César Vallejo por su concentración y capacidad de sufrimiento, y Pablo Neruda por ser de largo aliento y tener actitud para sumarse al ataque.
Lateral izquierdo: Alfonso Bioy Casares que es enérgico, creativo y capaz de alimentar a los delanteros con sus incursiones por la banda.
Lateral derecho: Arturo Uslar Pietri por tenaz y terco, todo un especialista en la marcación hombre a hombre.
Volantes: Octavio Paz que trajina por todo el campo, y es recuperador y metódico. Jorge Luis Borges, el 10 del equipo, marca la diferencia. Julio Ramón Ribeyro suele ser muy fino en espacios cortos. Augusto Monterroso por su manejo de los tiempos y su excelente pegada.
Delanteros: Guillermo Cabrera Infante porque su experiencia en las ligas inglesas lo ha convertido en un cabeceador eximio. Juan Rulfo que aparece poco pero siempre marca.
En el banco de suplentes: Juan Carlos Onetti por ser un defensa cuya rudeza intimida a los delanteros. José Lezama Lima, un volante tremendamente creativo aunque un tanto fuera de forma, es ideal para ingresar en los segundos tiempos. Alfonso Reyes que es un volante de contención fuerte y muy ortodoxo. Finalmente, como delantero suplente, Emilio Adolfo Westphalen que es insuperable cuando está en racha.
Director técnico: Julio Cortazar por su capacidad para detectar las estrategias del rival y desarmarlas.